Mi perro salchicha saltó del sofá y se dañó una vértebra de la espalda. Cada hora estaba más paralizado. El veterinario le dio una inyección para relajar los músculos y los nervios, pero no le dio más esperanzas de curación que una costosa cirugía.

Lo traté con Chi Palm en las vértebras específicas, en la cabeza, el sacro y en la parte inferior de las patas durante varios minutos. También hice un “barrido” desde su cabeza hasta todo su cuerpo, su columna y sus extremidades. Hice esto tres veces y lo hice durante tres días (tanto barriendo como aplicándolo en sus vértebras, cabeza, sacro y patas). ¡Y he aquí que empezó a correr y jugar afuera! Tres días y estaba libre de dolor. La condición nunca volvió a presentarse.